"Hola, querida amiga. Si estás leyendo esto, quizás estés pasando por una de las pruebas más duras: una ruptura. Quiero contarte mi historia. Tras una relación de años, me encontré sola, con mi corazón hecho añicos. Al principio, me perdí en un mar de tristeza, pero gradualmente, empecé a reconstruirme. Me di cuenta de que el amor propio es el primer paso hacia la sanación. Empecé con pequeñas cosas: cuidado personal, dedicar tiempo a mis pasiones, rodearme de amigos y familia. Aprendí que estar sola no significa estar incompleta. Y a ti, que estás atravesando por esto, quiero decirte que la fuerza que necesitas está en ti. Permítete sanar, crecer y amarte a ti misma. Con cada día, te volverás más fuerte y, eventualmente, estarás lista para abrir tu corazón de nuevo, esta vez con más sabiduría y amor propio." - Marta